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Manuel Villar Junquera

10:30

EL PODER DE LA HUMANIDAD: PAZ Y SOLIDARIDAD.

Veinticuatro de Junio de 1859: Un comerciante suizo llamado Henry Dunant, llega a la ciudad de Castiglione en el norte de Italia, justo en el momento en el ejércitos de Napoleón III, luchan contra los austriacos en Solferino.

Al final de la cruenta batalla, 5.000 soldados murieron y otros 12.000 resultaron heridos y abandonados por sus propios compañeros. Dunant, profundamente conmovido por esta situación, se encarga de organizar un improvisado hospital en la Iglesia de Castiglione y con la ayuda de mujeres del pueblo alienta a los heridos, trata de curar sus heridas, escribe mensajes a sus familiares, etc...

En el pensamiento de este comerciante aparece unan idea: “un enemigo herido ya no es un enemigo, sino alguien que necesita ayuda”. Además se plantea la necesidad de crear en todos los países, equipos de voluntarios que, en situaciones de conflicto puedan prestar ayuda a los heridos en combate. Había nacido la Cruz Roja.

Por tanto, el origen de esta Organización, presente en 178 países de todo el mundo, se encuentra en considerar la igualdad de todos los seres humanos, y en el imperativo moral de aliviar el sufrimiento en situaciones de adversidad y de dolor.

Está demostrado que la población civil es una de las principales víctimas en caso de enfrentamientos armados, de ahí que su protección sea una de las prioridades en este tipo de conflictos. Por lo tanto, para Cruz Roja es fundamental asegurar el respeto y la aplicación del Derecho Internacional Humanitario, que protege a las personas vulnerables como son los heridos, los enfermos, los prisioneros de guerra y la población civil.

En la actualidad, la Cruz Roja está interviniendo en 80 países en los que existen conflictos armados, muchos de los cuales hoy no son noticia de portada. No sabemos si, finalmente, se producirán nuevas guerras, pero a Cruz Roja no le corresponde especular sobre cuestiones políticas o militares. Nuestra preocupación es de carácter humanitario, es decir, prestar una asistencia apropiada a quienes más la necesitan en tiempos de crisis.

Sin duda alguna y como reza el lema del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, EL PODER DE LA HUMANIDAD, será el único valor realmente válido para los componentes del Movimiento en los ámbitos sociales políticos, culturales e incluso económicos. Nuestra meta es, a partir de ahora, difundir y promover el ideal de una humanidad que cree en la solidaridad, la paz y en el compromiso con los más vulnerables.

MANUEL VILLAR JUNQUERA
Presidente de Cruz Roja Española en Extremadura